Mi nombre es Nuria. Tengo 49 años, estoy casada y tengo 2 hijos, una chica de 18 años y un niño de 15, que son mi motivo para luchar en este mundo.

Soy diplomada en Óptica y optometría y durante 22 años dirigí mi propio establecimiento de óptica, junto a mi marido. Paralelamente a mi profesión, me he formado y he realizado cursos donde he aprendido como una alimentación limpia y saludable puede influir en nuestra salud y ayudarnos a sentir mayor bienestar.

Y por supuesto, he aplicado en mi misma todos los conocimientos que he adquirido a lo largo de los años. Puedo asegurar, por lo tanto, que llevo una alimentación bastante equilibrada y libre de muchos de los productos que causan las enfermedades hoy en día.

Pero eso no me libró de pasar por una situación emocional muy dura que puso en grave peligro mi salud.  A raíz de la crisis que nos afectó tanto a muchos empresarios, en 2017 me ví obligada a cerrar mi negocio. Mi futuro era desolador. Mi marido y yo compartíamos negocio, es decir, los ingresos en mi familia procedían del mismo sitio. Los dos éramos autónomos lo que significaba que no teníamos derecho a paro. Y con los pocos ahorros que teníamos, podríamos mantenernos unos pocos meses. Y teníamos 2 hijos en una edad en la que estaban empezando a planificar sus estudios, su futuro.  A pesar de seguir buscando trabajo, tanto en mi sector como en otro cualquiera que me pudiesen ofrecer, me encontré con muchos NO. NO por la edad, NO porque solo tenía experiencia en un sector, NO por qué no daba el perfil……..

Nunca he sido una persona muy negativa pero esta situación me pudo y lo único que quería era morirme. Tiré la toalla y no me planteaba el luchar, ni siquiera por mis hijos. Y lo deseé tanto y tan sinceramente que el universo me lo trajo. Empecé a encontrarme mal, a perder peso, a no tener fuerzas para hacer nada….. y yo por dentro estaba encantada, porque eso era precisamente lo que quería, morirme. Pero la vida y la luz siempre acaban encontrando el camino para volver. Así que un día me desperté y decidí que no, que todavía tenía muchas cosas por hacer, que había mucha gente que me necesitaba y que tenía que hacer algo para volverme a encontrar bien.

Por mis conocimientos sobre cómo actúan los alimentos en el cuerpo, sabía que se podía hacer algo más, que podía encontrar algo que me ayudara a ver la vida de forma más positiva, algo que me ayudara a sentirme con energía y saludable.

Acudí a Gloria, mi naturópata y amiga desde hacía muchos años y me habló de Fitline. Ella estaba encantada con los resultados que estaba viendo en si misma y me lo recomendó.

¿Y cuál fue mi experiencia con el set optimal de Fitline? En 3 meses había conseguido ser otra persona. Me sentía con más energía, descansaba por la noche, mis digestiones habían mejorado, mi piel estaba más hidratada y mi pelo y mis uñas más fuertes y con brillo.

Pero lo mejor de todo, fue que volvió mi ilusión por la vida. Descubrí un mundo que me está apasionando: ayudar a los demás desde un sector que siempre me ha gustado, la nutrición real de nuestras células.

Después de estar varios meses como consumidora y experimentar mejorías en mi cuerpo decidí entrar a trabajar con PM INTERNATIONAL.

Nunca había trabajado en Network Marketing pero sí que había pasado 22 años vendiendo y recomendando salud visual. Así que pensé que esto sería algo parecido.

Pero he descubierto que no tiene nada que ver….¡¡ es mucho mejor !!  Yo soy la qué decido cuánto quiero trabajar y como consecuencia, que ingresos puedo tener. ¿Y esto qué significa? Que no hay límite. Recuerdo la cantidad de gafas que tenía que vender para conseguir llegar a final de mes. Y la cantidad de facturas que tenía que pagar y que se llevaban casi todos los ingresos obtenidos con esas ventas. En PM INTERNATIONAL mi inversión ha sido mínima y sé que cuanto más doy a conocer mi empresa y mis suplementos de nutrición, fitness y belleza, más ingresos consigo a final de mes.

Además, trabajar en esta empresa ha supuesto un crecimiento personal impresionante. Puedo decir con toda certeza que para nada soy la persona que salió con un diagnóstico de diabetes autoinmune del hospital. He controlado mi salud, he superado mis miedos a enfrentarme a algo nuevo y desconocido, he roto las limitaciones que me impedían relacionarme con desconocidos.

Este crecimiento personal no hubiera sido posible sin el apoyo de mi equipo de trabajo GOLD TEAM, un equipo formado por personas luchadoras, con ilusión, con ganas de ayudar a mejorar muchas vidas. Un equipo de personas con la filosofía de construir algo grande, de romper límites y demostrar que entre todos la vida se puede vivir desde el color y la alegría.